viernes, 12 de abril de 2013

EL FRAUDE DEL MATEMÁTICO - Jill Paton Walsh

[La protagonista Imogen, una enfermera de Cambridge, y un profesor de Cambridge, experto en biografías, hablan sobre la biografía de un matemático, Summerfield, a quien le van a dar un premio póstumo por su trabajo]

- Me gustaría conocer qué motivos exactos tuvo para delegar este trabajo en una alumna en vez de realizarlo usted mismo.


- Sí, supongo que es algo que no me hace quedar muy bien, pero lo cierto es que pensé que el trabajo resultaría demasiado aburrido. Profesionalmente lo que a mí me interesa es poner de manifiesto las supercherías. Demoler las idealizaciones patéticamente falsas por las que la gente rige sus vidas. …Me pareció que la demolición del viejo Summerfield carecía de todo interés. Era un hombre sin imaginación, incapaz de erigir ante sí una fachada mínimamente estimulante. Indagué con algunos expertos y me dijeron que la obra matemática de Summerfield se considera meritoria, un auténtico descubrimiento, aunque se trata, simplemente, de un apéndice de la de Penrose. Penrose descubrió unas extrañas formas geométricas que no se repiten hasta el infinito en ninguna dirección, pero, que si uno las rota, consigue una especie de fantasmales pentágonos. Con ese descubrimiento conmovió el mundo de las matemáticas. Por lo visto, se trata de algo sumamente divertido. Summerfield descubrió una variedad de tal fenómeno, heptágonos fantasmales. También divertidos.

- Y si trata de algo que no se puede desacreditar con facilidad, supongo.

- No por alguien que no sea un matemático, desde luego.

…Mientras Josh daba un beso de buenos días a Fran [la alumna que está realizando la biografía de Summerfield], Imagen abrió el sobre y extendió las fotos sobre la mesa. Sólo una tenue impresión de la delicada y sutil belleza de la colcha había sobrevivido a la transformación en fotografía; pero cuando Fran se separó de su novio y volvió a sentarse, Imagen vio con satisfacción la cara de la cara al ver las fotos. Tomó la más próxima y la miró, ceñuda.

- Esto es de Gideon [nombre de pila de Summerfield] -dijo-. Su famosa figura geométrica. Convertida en una colcha. Es una preciosidad, pero qué cosa tan absurda, ¿no?

- Aunque en una foto quizás no se note, se trata de una colcha antigua-dijo Imagen.

- No puede ser de antes de 1979-dijo Fran.

- Es muy anterior -dijo Imagen-. Yo diría que fue hecha en los años veinte.

- Pero ¿qué dice Imogen? ¿Y dónde encontraste esa asombrosa colcha?

- En el dormitorio de invitados de Quarry Farm, en el valle Tanat. Lo cual creo que nos indica con claridad dónde pasó tu amigo Summerfield el verano del setenta y ocho, y por qué ese es un secreto por el que merece la pena matar. Y por qué una biógrafa recién regresada de una excursión de Gales puede encontrarse en grave peligro.

- Debemos de llamar a la policía -dijo Josh.

- ¿Quieres decir que Summerfield robó su supuesto descubrimiento? -preguntó Fran, perpleja. Sostenía una foto en cada mano y su vista iba de una a otra-. Sí, esto es, no cabe duda: una especie de proyección de Penrose, sólo que con heptágonos fantasmales en vez de pentágonos… ¡No descubrió nada, se lo apropió! ¡El muy sinverguenza! Y, Cristo, eso explica el súbito y hasta ahora inexplicable ramalazo de brillantez que desconcertó a cuantos conocían a Summerfield. ¡Esto es dinamita, Imagen! ¡Verás cuando se lo diga al profesor Maverack! 


SINOPSIS

Los sucesivos biógrafos de un célebre matemático desaparecen o mueren misteriosamente. Fran, una estudiante, decide acometer la empresa, ajena al sospechoso destino de sus predecesores. La enfermera del colegio universitario, Imogen Quy, guiándose por su agudo olfato para el crimen, intuye que la vida del matemático esconde algún secreto inconfesable y desaconseja a Fran la tarea. Pero la estudiante vence obstáculos y avanza en su investigación, sin imaginar que sobre ella se cierne un peligro cada vez mayor, e Imogen deberá actuar antes de que sea demasiado tarde.
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario